Mejor conocida como @amandajasnowskipascual en Instagram, Amanda Jasnowski es una fotógrafa «freelance» nacida en España, criada en Ohio y que dejó su hogar para perseguir su sueño en Nueva York. Amanda tiene un portfolio muy diverso y obtuvo un mayor seguimiento para alguien que tiene solamente 21 años. Definitivamente ella se ha hecho a si misma través editoriales, moda, viajes y la fotografía documental.
Ohio, un pequeño pueblo, no fue exactamente lo mejor para esta soñadora, se sentía como un «outsider», porque no podía compartir su conexión creativa con nadie. Amanda comenzó cuando tenía 14 años con una vía propia de expresión conectada a su «corazón adolescente ansioso». Cuando consiguió una cámara profesional tenía 17 años y esto entonces se convirtió en verdadera pasión y comenzó a desarrollar más habilidades fotográficas. Sin embargo, viviendo en Ohio no da a Amanda muchas oportunidades y ella decide dar el primer paso hacia fuera y abandonar el lugar que no podía ofrecer lo que realmente quería. Ahora con sede en Nueva York, afirma que la fotografía consume todo su tiempo y es lo que quiere hacer con su vida. Haciendo fotografía como pasión y carrera son dos enfoques muy diferentes. «Tengo que reconocer los límites creativos provocados por un trabajo en particular, saber cómo modificar mi estética pero todavía asegurándome de que es mío. Creo que con el tiempo mi voz creativa crece y se fortalece gracias a un trabajo en constante progreso.«
Es sorprendente ver evolucionar los trabajos de Amanda. Sus fotografías tienen percepciones más gráficas ahora en comparación con el estilo orgánico adoptado cuando comenzó. Ella sigue manteniendo su distintiva toma ecléctica de colores, texturas y formas.
ENG: Better known as hokaytokay on Instagram, Amanda Jasnowski is a born-Spanish, Ohio-raised freelance photographer who left home for Brooklyn, New York to chase her dream. Amanda has a wonderfully diverse portfolio and garnered a greater following for someone who is only 21. She has definitely made a name for herself in editorial, fashion, travel and documentary photography.
Growing up in a small town in Ohio wasn’t exactly the best for this artsy-dreamer who felt like an “outsider” because she couldn’t share any creative connection with anyone. Amanda started shooting when she was 14 as an avenue for expression for her “angsty teenage heart.” This then grew into a passion when she got a professional camera at 17 and started to pick up more in-depth film photography skills. However, living in Ohio didn’t give Amanda much opportunities for photography collaborations which she craved for. These miserable times made up her mind to take the first step out and leave Ohio – the place that couldn’t offer what she really wanted. Now based in New York, she declares that photography consumes her life and it is what she wants to do with her life. Doing photography as a passion and career are widely different but Amanda hadn’t lost her style in her photos. “I have to acknowledge the creative boundaries brought on by a particular job, knowing how to alter my aesthetic but still making sure it is my own. It’s a constant work in progress, but I think it gets easier with time as your creative voice grows and strengthens.”
It is amazing to watch Amanda’s works evolve. Her photographs have more graphic perceptions now as compared to the organic style adopted when she first started out, but she is keeping her distinctive eclectic take with colours, textures and shapes.