La pintura de Afarin Sajedi destaca por su creatividad, su técnica y su potente puesta en escena.
El surrealismo pop en la pintura de Afarin Sajedi. Ilustra personajes teatrales con caras coloridas que se inspiran en el teatro japonés, también utiliza símbolos de arte religioso occidental, pero con estilo contemporáneo.
Normalmente sus personajes son reales, majestuosos y con una mirada profunda. Los peces simbolizan la mayoría de sus obras y las convierten en algo más cercano al surrealismo o al surrealismo pop.
Afarin Sajedi es una artista Iraní nacida en 1979 en Shiraz. Llegó a Teherán para estudiar en la Universidad Azad de Teherán, donde se licenció en diseño gráfico y empezó su carrera como artista, hoy en día es muy reconocida a nivel mundial uno de los rasgos representativos de su obra, son los rostros de mujeres muy expresivos, capturan tanto el dolor, como la alegría.
“Bon Appétit” la más reciente exposición de pintura de Afarin Sajedi
“Bon Appétit” esta compuesta por lienzos que son todo un banquete de flores, carne, pescado, vino y champán que se convierten en poderosas metáforas de la efímera naturaleza de la vida. A través del acto sagrado de comer y del simbolismo de la mesa puesta, aborda la complejidad de la naturaleza humana, con un elaborado tejido que combina la invitación y la provocación.
El centro de la puesta en escena es la figura femenina que interactúa con los platos “puestos en la mesa” por Sajedi. La saturación de los colores y el temor que provoca la obra de la artista hacen que sus lienzos tengan un sabor renacentista que se mezcla con la elegancia del rococó.
La genialidad artística de Sajedi brilla en esta serie de obras, como un tapiz de gran valor que entreteje referentes culturales con una gran sensibilidad moderna. Con una narrativa magistral, Sajedi (enlace) expone una historia llena de ironía, mostrando su corazón al desnudo e invitando al público a participar en un banquete artístico con una declaración audaz y de labios rojos.
El surrealismo pop en la pintura de Afarin Sajedi. Por Leonardo Lee.