Flavio Morais (São Paulo, Brasil, 1954) ha forjado una trayectoria artística profundamente influenciada por su infancia en los suburbios, un entorno impregnado de la cultura popular que marcó su vida y su obra.
Flavi Morais y la cultura popular que marcó su vida y su obra. Desde temprana edad, su primer contacto con el arte fue a través de los dibujos de estilo ingenuo de su padre, un soldador de oficio. Flavio recuerda vívidamente cómo su padre, con el fin de memorizar y entender la mecánica de los autos Volkswagen, copiaba a mano un libro entero.



Aquellas ilustraciones, realizadas sin las herramientas adecuadas, dejaron una huella indeleble en su imaginación y plantaron las semillas de su fascinación por lo rudimentario y lo hecho a mano. Esta experiencia fue el prólogo de su inmersión en el universo del Pop Art de las décadas de 1960 y 1970, un movimiento que lo encaminó hacia su carrera como ilustrador.
Más adelante, Flavio se trasladó a Inglaterra, donde estudió arte en la Chelsea School of Art. Durante este periodo, el contacto con los grandes maestros de la vanguardia alimentó su curiosidad y despertó en él una pasión inagotable por la experimentación. En su búsqueda incansable de nuevas formas y lenguajes visuales, encontró un espacio donde la libertad creativa y la expresión personal se entrelazaban sin límites.

Un hilo conductor en su obra es su fascinación por la fantasía infantil. La mirada pura y sin prejuicios de los niños, ajena a las reglas y convenciones del mundo adulto, ha sido una fuente constante de inspiración para él. También se siente atraído por el Arte Outsider, las creaciones de aquellos que operan al margen de las normas establecidas, en las que encuentra frescura y espontaneidad que enriquecen su proceso creativo.
El humor es otro elemento esencial en su trabajo. Para Flavio, el humor es un contrapeso vital, una herramienta de escape y subversión que hace la vida más llevadera y ofrece un respiro irónico en momentos difíciles.
A través del humor Flavi Morais desafía la cotidianidad y encuentra una forma de reinterpretarlo todo en un entorno impregnado de la cultura popular que marcó la vida y la obra



Su obra no busca transmitir mensajes fijos o unívocos. Al contrario, Flavio invita al espectador a interactuar con ella, a «bailar» con su espíritu lúdico y a participar activamente en su interpretación. Para él, el arte es un ejercicio de libertad, un juego de movimientos donde la verdadera satisfacción radica en el descubrimiento y la participación.


Finalmente, Flavio siempre regresa a la sencillez del lápiz sobre papel, un medio que, aunque modesto, le proporciona una conexión directa e inmediata con la esencia de su creatividad. Es en esta simplicidad donde encuentra la libertad para explorar, jugar y crear, y donde su arte encuentra su forma más pura.
Flavi Morais y la cultura popular que marcó su vida y su obra