Una región de más de 2.000 años, con una variedad que únicamente se da en estas 300 ha, al lado de Barcelona.
Raventós D Aleya y la tipicidad de la Pansa Blanca. Un suelo granítico, el sauló, bajo en nutrientes, mantiene una acidez fresca, larga absolutamente singular combinada con un nivel de maduración fantástica que dejan mostrar la tipicidad de la Pansa Blanca, variedad que tiene una capacidad de guarda impresionante.
Sarriera es el nombre del paraje donde se originan las uvas con las que se elabora este vino a base de Pansa Blanca ecológica de Raventós de Alella.
Un blanco de finca con notas de frutas y flores blancas, procedente de una añada que no fue especialmente seca, aunque sí algo más en su segunda mitad.
El resultado es puro equilibrio y frescura. Un vino mimado en su elaboración, muy equilibrado y con un postgusto largo.
El Sauló, tan poco fértil, acompañado de una orografía montañosa de parcelas pequeñas y muy antiguas hace que ningún elaborador industrial encuentre económicamente viable la zona, motivo por el cual muchas familias pudieron conservar una superficie de casi 60 ha de viñedo centenario.
Las montañas, además, nos dan una buena sanidad, diferentes orientaciones y diferentes niveles de arcillas mezcladas en el sauló.
Raventós D Aleya y la tipicidad de la Pansa Blanca. El nivel de singularidad, acidez, profundidad, textura, estructura y capacidad de guarda nos enmarca en la categoría de candidato a gran vino del mundo.
Para acabar de completar el cuadro, son extraordinariamente fáciles de entender y de disfrutar, también para los no iniciados. Ahora pregunto: ¿Es un sueño? No, es Alella.
Raventós de Alella no es solo un proyecto singular, sino que es la máxima expresión de la obsesión de una nueva generación que quiere mostrar al mundo la importancia real de una región y una variedad. Alella y la Pansa Blanca son para este proyecto la misma cosa. No es un proyecto historiográfico para documentar, como era la vida de hace 2.000 años.
Bodega localizada entre viñedos viejos y bosques del interior de la cordillera litoral que divide la DO Alella. Desde la primera añada elaborada en la bodega moderna, el 1981, la filosofía ha sido la extracción de las máximas posibilidades de la variedad genuina de la zona: la Pansa Blanca.
El carácter innovador, vanguardista e internacional de la bodega ha dado unos vinos en constante evolución, manteniendo al máximo el respeto por el producto natural y la identidad de la zona.
La uva pasa por la mesa de selección, se prensa entera y se fermenta a baja temperatura procurando preservar las propiedades de la fruta. Todas las parcelas que podemos las prensamos y vinificamos por separado. Investigamos y descubrimos cosas nuevas cada día.