Los duetos en el post-punk de estos tiempos son casi un standart, y aunque han existido desde el origen del género, recientemente han tenido más auge gracias a lo que la tecnología permite
Las melodías fantasmales de Twin Tribes. También es innegable que duetos firmes como She Past Away, Lebanon Hanover, Selofan,o Drab Majesty en esta parte del mundo han dejado una estela de influencia en muchos nuevos creadores.
Es difícil sobresalir, todos los días se encienden luces, conceptos, sonidos (algunos replicados, otros frescos) pero por ahora parece inagotable la tendencia del post-punk/darkwave/coldwave o lo que se acumule en la semana en el mundo.
La banda texana Twin Tribes tiene mucho de todo esto; por un lado la vitalidad de un proyecto reciente, con una una tabula rasa para escribir y la intensión de figurar en un universo repleto de buenos músicos dedicados a los mismos menesteres, y por otro lado el estigma de hacer música en este momento del siglo XXI donde todo es cínico y ya nada es novedoso.
Las melodías fantasmales de Twin Tribes. A pesar de toda la adversidad en esta realidad de sueños truncados (sobre todo dentro de la música independiente) Twin Tribes ha hecho un disco puramente estético en su LP debut «Shadows» de 2018.
El álbum tiene de lo bueno de un new wave que pasa por un filtro de misterio y sucesos paranormales, pero también está en su estilo el post-punk fino, de fuertes bajeos de innegable raíz ochentera.
Además en sus canciones existe ese elemento que es propio de este siglo que los lleva a sonar tal como una banda que nació en esta línea de tiempo. Hay evidentes influencias algunos gigantes contemporáneos del post-punk, pero no es un aspecto negativo, Twin Tribes edifica y logra lo suyo en un ambiente que se podría catalogar como darkwave meets new romantics.
El álbum abre con ‘The Path to Antares’ y desde luego que es la perfecta introducción cósmica-instrumental a los demás temas del disco. Luego ‘Shadows’ es un momento de post-punk estandarizado, y un tema enérgico que tiene de todo para ser memorable, para sonar en cualquier radio digital y una melodía pop arrasadora; esta es, por ahora, la joya de Twin Tribes.

‘The Vessel’ explica muy bien las cualidades de esta banda por sus lazos con una empedernida oscuridad que termina cediendo a las buenas melodías, tal como dos planos existenciales que conviven. Y ‘Lapiz Lazuli’ es una melodía fantástica con bases en un sintetizador que sin duda pondría celoso a John Carpenter y sus scores para sus películas de horror. ‘Tower of Glass’ es una canción tan agradable como vibrosa, su amplitud sonora, su lírica simple y su estribillo poderoso la hacen una canción trascendente. ‘Dark Crystal’ cabe perfectamente en el synthwave y de nuevo vuelvo a caer en la vitalidad que tienen Luis Navarro y Joel Nino, Jr. en este binomio que hace muy buenas canciones. ‘Portal to the Void’ tiene algo que conecta con The Nephilim, pero en general termina cediendo por su energía fugaz y nos conduce directo al vacío.
El álbum corta el hilo dramático fantasmal con ‘Cathartsis’, una canción emocional, dura, contundente en su fijación oscura. Y en su totalidad, «Shadows» de Twin Tribes sale a flote por su carácter melódico, sus estados de ánimo espectrales y la buena forma que han encontrado estos dos músicos texanos para entretener sin rodeos o falsas pretensiones.

Es bueno saber tu potencial, no abandonar del todo el buen pop, aunque tengas una psique retorcida. Esta banda ha entendido cómo hacer buen post-punk en un momento sórdido en el que necesitas fajarte bien y sacar todo lo que llevas en el tanque para ser recordado.
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