La magia de lo cotidiano es algo con lo que suele empatizar el espectador de cualquier pieza artística porque los mortales no tenemos un sueño más grande que llenarlo todo de vida y color.
Amy Sherald y la colorida cotidianidad afroamericana. Su obra es justo y complejamente eso, vida y color, la de una galeria de personajes afroamericanos que miran directos al espectador en lugares comunes para todos, en playas, jardines o habitaciones.
Amy Sherald (1973) es una retratista y pintora figurativa estadounidense que define su estilo como un realismo minimalista.
Desde 2012, su trabajo ha utilizado grisalla para retratar los tonos de piel, una elección que ella misma describe como destinada a desafiar las convenciones sobre el color de la piel y de la raza.
En 2016, Sherald se convirtió en la primera mujer y la primera afroamericana en ganar el concurso de retratos ‘Outwin Boochever’ de la National Portrait Galler con su pintura, ‘Miss Everything (Unsuppressed Deliverance)’ .
Al año siguiente, ella y Kehinde Wiley fueron seleccionadas por el ex presidente Barack Obama (Wiley) y la ex primera dama Michelle Obama (Sherald) para pintar sus retratos oficiales, convirtiéndose en los primeros afroamericanos en recibir comisiones de retratos presidenciales.
En ‘The Great American Fact’, Amy Sherald nos adentra en una serie de retratos deslumbrantes y con una gama cromática vibrante.
Desde una mujer descansando en una bicicleta hasta dos surfistas que se preparan para coger olas, las pinturas al óleo observan momentos de respiro y placer a una escala monumental, a veces de casi dos metros de ancho.
Aunque rodea a sus sujetos con vívidos parches de color y los retrata vistiendo prendas de estampados alegres y estridentes. Sherald continúa representando la piel de sus sujetos en su característica escala de grises.
Amy Sherald y la colorida cotidianidad afroamericana. Las tonalidades cutáneas hacen que las figuras se lean, en palabras de la autora,
“De una de manera universal, donde podrían convertirse en parte de la narrativa histórica del arte convencional«.
Esta nueva serie también presenta elementos sinónimo de la cultura estadounidense, incluida una valla blanca, una camiseta de Barbie o un coche retro.
Sherald proporciona pautas para considerar la «negritud pública» y reivindica que la vida de los negros se ha centrado en lidiar con la injusticia y los problemas sociales.
Amy, a través de su perspectiva creativa, da un giro y una visión matizada e inclusiva de sus sujetos que nos entusiasma y nos libera.
Amy Sherald y la colorida cotidianidad afroamericana. Fuente: Luiki Alonso