La escena fotográfica rusa ha estado muy activa recientemente y acaba de lanzar una nueva revista: «Violet INNER VISION» se publica bajo la coordinación de Anna Block. La publicación sigue siendo confidencial ya que la impresión es de solo 40 copias. El primer número fue publicado en julio de 2017 y contiene fotografías de Nikita Khalkin, Katherina Sadovsky y Andrey Krapivin. Cada copia está firmada por los tres autores y Anna Block contiene una pequeña publicación, también firmada y numerada. Esta revista es sobria con un diseño elegante que, de nuevo, valora las fotografías. Más allá del descubrimiento de estos autores, aún desconocidos para nosotros, hay un interesante intento de manipular la forma narrativa que combina las diferentes fotografías. Las imágenes aparecen una tras otra y no sabemos, en primer lugar, quién es el autor, incluso si sigue un estilo de cada serie. Luego presenciamos una narración con tres voces, imágenes que responden entre sí para crear un significado adicional. Las explicaciones se nos dan solo en el colofón. El tema de este primer número se centra en las imágenes consideradas tabúes, blasfemas, pornográficas o morbosas. Una nueva revista que será interesante de ver.
ENG: The Russian photographic scene has been very active recently and a new magazine has just been released : « Violet INNER VISION » is published under the coordination of Anna Block. The publication still remains confidential since the print is only 40 copies. The first issue was published in July 2017 and contains photographs of Nikita Khalkin, Katherina Sadovsky and Andrey Krapivin. Each copy is signed by the three authors and Anna Block and contains a small print, also signed and numbered. This magazine is sober with an elegant layout that, again, values the photographs. Beyond the discovery of these authors, still unknown to us, there is an interesting attempt to manipulate the narrative form that combines the different photographs. The images follow one another and we do not know, first,who is the author, even if a style emerges from each series. We then witness a narrative with three voices, images responding to each other to create an additional meaning. The explanations are given to us only in the colophon. The subject of this first issue focuses on the images considered as tabooed, blasphemous, pornographic or morbid. A new magazine which will be interesting to keep an eye on.