[youtube https://www.youtube.com/watch?v=UBS4Gi1y_nc&w=560&h=315]
Es difícil que, bajo determinadas circunstancias, algo pueda impactar tanto como el videoclip de Windowlicker. En esencia, para que este impacto sea máximo se han de dar dos factores clave: desconocer por completo la obra de Aphex Twin y no haber visto jamás el videoclip. Si además el visionado se produce de forma casual -ya sea dando con el video de pura casualidad en la televisión o topando con él en Internet- el momento fluctuará entre lo epifánico y lo catárquico, una experiencia tan irrepetible como el primer polvo echado y a la par de desconcertante. La importancia de la unidad que forman la canción de Aphex Twin y el video de Chris Cunningham, con más de 15 años, sigue siendo enorme. No sé cuantos de quienes lleguen a leer esto pudieron ver en 1999 el videoclip sin previo aviso en la franja horaria nocturna de las cadenas foráneas que en algunos hogares se sintonizaban (la MTV y la alemana VIVA TV le dieron bastante rotación a la versión íntegra del vídeo), pero de haberlo hecho alguno nos atrevemos a asegurar que coincidirá con nosotros en que los 20 segundos de limusina previos a la aparición de Aphex Twin son la cosa más grande, grotesca, insana e hiperbólica que jamás emitió una televisión.