La población contemporánea vive hundida en –y raptada por– una depredadora vorágine de insulsez y superfluidad en la que no necesita prestar atención continuada y perseverante a nada en absoluto: el ‘scrolling’ infinito se ha convertido en nuestra manera acostumbrada de habitar el mundo. Alimentar el misterio, mantener la atención. Durante los últimos años he…