La tendencia es que los imbéciles ocupen los puestos de responsabilidad
«Elogio del imbécil» de Pino Aprile ¿Por qué hay tantos imbéciles en el mundo? ¿A qué se debe que el primero en ascender sea, invariablemente, el más idiota de la oficina? ¿Por qué cuando nos abandonan es siempre por un perfecto/a descerebrado/a? El conocido periodista italiano Pino Aprile contesta a estas preguntas con tanta ironía como «espíritu científico».
El Nobel era un anciano que no aceptaba entrevistas. Después de leerse toda la obra de Lorenz, Aprile se acercó al domicilio particular de Lorenz y lo abordó en la puerta de su casa. El científico le atendió con simpatía y lo invitó a tomar un té. Cuando la entrevista periodística pasó a conversación en confianza el periodista lanzó las preguntas que lo movieron hasta la casa de Lorenz: “Profesor ¿no cree usted que el comportamiento humano tiende muchas veces a reducir el uso de la inteligencia, en vez de aumentarlo?¿Y que algo así está inducido, incluso impuesto, por la sociedad, por la cultura? ¿Estamos condicionados por una especie de selección cultural (y natural) que nos aboca a la imbecilidad?”
Lorenz valoró las preguntas del periodista y puso algunos ejemplos que ratifican esa evolución hacia la imbecibilidad de la especie humana: la segunda guerra mundial y la presidencia de Ronald Reagan con su carrera armamentística y la guerra de las galaxias. La muerte de Lorenz en 1989 impidió que continuara una relación intelectual que prometía. Pero un tiempo después el periodista italiano recibió una carta de un profesor de Filosofía, compañero de Lorenz, que se interesaba por los planteamientos de Pino Aprile. A partir de la correspondencia entre ambos surge el ensayo ‘Elogio del imbécil’.
En su libro Pino Aprile analiza la evolución de la especie humana y sostiene que los hombres y las mujeres inteligentes suelen ser apartados en la comunidad humana, la tendencia es que los imbéciles ocupen los puestos de responsabilidad, por decirlo en un lenguaje que entiendan todos los tontos: el futuro de la humanidad es de los imbéciles.
El argumento que presenta sobre la evolución de la especie humana y la supuesta pérdida de inteligencia en la sociedad actual es controvertido y no está respaldado por evidencia científica sólida.
Si bien es cierto que la inteligencia no siempre es un factor determinante en la ocupación de puestos de responsabilidad en la sociedad actual, esto no significa que la especie humana esté perdiendo su capacidad cognitiva. La inteligencia es una característica compleja y multifactorial, y no es posible medirla de manera precisa y universal.
Es importante tener en cuenta que la evolución no se detiene y que la selección natural sigue actuando en nuestra especie. Es posible que en el futuro la inteligencia tenga un papel importante en la supervivencia y adaptación de la especie humana a los cambios ambientales y sociales. Además, es importante valorar la diversidad de habilidades y talentos que existen en la sociedad, y no reducir el éxito y el progreso únicamente a la inteligencia.
En cuanto a la cita de Jorge Luis Borges, es cierto que muchas personas con talento se sienten más conectadas con la historia y la cultura que con la sociedad contemporánea. Sin embargo, esto no significa que la inteligencia y el talento sean valores obsoletos en la sociedad actual, ni que las personas que los poseen estén destinadas a ser marginadas o excluidas. La sociedad necesita personas inteligentes y creativas para enfrentar los desafíos actuales y construir un futuro mejor.
«Elogio del imbécil» de Pino Aprile. Texto: Juan García Luján