Muchas veces hemos pensado en la cantidad de sensaciones que provoca un objeto tan sencillo como un globo, ese juguete hecho de aire que siendo apenas inexistente concentra millones de sueños e ilusiones.
Los autorretratos conceptuales con globos de Fares Micue. Un globo flotando en un determinado espacio, evoca fantasía y magia ya sea atado de una cuerda o perdiéndose en la estratosfera; hay toda una simbología asociada a este centenario juguete que, por ejemplo, se muestra en el maravilloso corto ‘Le Ballon Rouge’ de Albert Lamorisse.
Sobre la búsqueda de la simbología y las imágenes que sugieren estos pasatiempos hinchables, ha basado su obra la mente creativa de Fares Micue.
Fares Micue es una fotógrafa conceptual de bellas artes nacida en Lanzarote, Islas Canarias. Comenzó a practicar fotografía como hobbie en el año 2009, estudiando y practicando de forma autodidacta; desde entonces su amor por esta disciplina no hizo más que crecer, convirtiéndose finalmente en su mayor pasión y covirtiéndose en una excelente fotógrafa con marcada personalidad.
Sus imágenes se caracterizan por un fuerte contenido conceptual,simbología y el uso de colores muy saturados como medio para expresar sus ideas; muchas de sus imágenes hablan de amor, superación o amor propio dando rienda suelta a su mundo interior. Para Fares Micue la estética y armonía visual son parte esencial de su trabajo.
Los autorretratos conceptuales con globos de Fares Micue. En estos autorretratos, los globos encierran el concepto de una obra onírica que, paradójicamente, explota en una variedad cromática perfectamente seleccionada.
Se presentan suspendidos en movimiento mientras rodean el torso de Micue, ocultan su rostro o la conducen por una escalera pintada. Los grupos amorfos agregan un marcado contraste a su ropa y al fondo o se mezclan con la paleta arquitectónica existente.
Micue declara que si bien aporta elementos orgánicos como flores y hojas para evocar los patrones estacionales de la tierra, los globos representan los elementos más fundamentales y constantes del universo, como el Sol, la Luna y los planetas.
«Para mí, la forma redonda representa la perfección, los sentimientos, la energía y el fluir natural de las cosas. Tiene la capacidad de moverse fácilmente como una pelota y nos ayuda a avanzar como una rueda.
Son delicados y suaves. Nada se puede esconder alrededor de un círculo porque no tiene aristas ni esquinas puntiagudas, y eso es lo que representan en mi trabajo: la pureza y naturalidad de nuestros sentimientos y cómo nos ayudan a avanzar, la energía que compartimos con el mundo, y cómo siempre nos rodean dando forma a nuestra vida cotidiana».
En las fotografías de Fares, la perfección abrumadora no solo queda relegada a la forma de los globos que invaden el mundo y el universo de una artista en constante movimiento y en la constante búsqueda de cerrar sus círculos y dejarlos volar libres.
Los autorretratos conceptuales con globos de Fares Micue. Fuente: Luiki Alonso