Misteriosas y enigmáticas, las fotografías de Denise Grünstein se convierten en estampas inolvidables. Inspirada en la fotografía de moda y algunos fotógrafos como Rodney Smith, Tim Walker, Cade Martin, entre otros, sus imágenes se han distinguido y han sido material para diversas editoriales de moda y diseño. Grünstein es considerada una de las fotógrafas más importantes de Suecia. En su obra adhiere todos los conocimientos que posee acerca de la fotografía, el diseño editorial y la moda, además de afirmar que a través de ésta fluyen sus sentimientos y sus sueños, pero los reinterpreta como si se tratara de algún promocional para una película. Entre sus particularidades se encuentra una composición acertada, el contraste de objetos que generan armonía en el entorno, y, sobre todo, un muy buen uso del color. Sus fotografías remiten a un escenario fantasioso creado para una secuencia cinematográfica o un “shooting” de moda, pero siempre con su particular enfoque que envuelve en un ambiente utópico, como si no se fuera capaz de predecir lo que va ocurrir ahí. Mujeres que cubren su rostro con su cabello, antifaces o máscaras, paisajes rodeados de cielo, mar, arena y áreas abandonadas, además de personajes singulares que se aprecian entre las sombras son algunos de los principales componentes dentro de sus imágenes, las que se reconocen por su destacada poesía visual.
ENG: They’re mysterious presences, belonging to any and no era. They’re the women at the center of Denise Grünstein’s photographs. In the setting of the Nationalmuseum in Stockholm, nature, history and femininity are intertwined in a story of timeless emotions. There’s no beginning and no end in Grünstein’s photography. The story, assembled with symbolic and dream-like compositions, lives through emotions, the true narrative motor of her creations. An imaginary world soaked in Romanticism, in an age when there’s no longer anything romantic. The photographer juxtaposes images in a complex game between past, present and future. Temporal ambiguity is a subtle wind that blows on every shot, sculpting arabesques, drawing shadows, concealing faces and ruffling hair. From the heights of her authorial stature, Swedish photographer Denise Grünstein once again stands out for her use of Gestalt theory in staged photography, constructing the reality to be photographed. And allowing us to dream as she subverts proportions and perceptions.