Bob Coonts es una figura esencial del arte contemporáneo en Estados Unidos.
Seis décadas de arte contemporáneo y color con Bob Coonts. Se erige como una figura imprescindible dentro del arte contemporáneo norteamericano. Graduado en 1963 por la Colorado State University, su carrera comenzó en el ámbito del diseño y la ilustración, donde trabajó durante más de tres décadas, al tiempo que compartía su conocimiento como docente durante 35 años en la misma institución como Affiliate Faculty Member. Desde 1994, su principal dedicación ha sido la pintura, disciplina en la que ha desarrollado un lenguaje visual inconfundible.

El color como esencia creativa
Coonts es un artista profundamente colorista, cercano en espíritu a los fauvistas, y su obra destaca por una experimentación constante. Aunque domina la representación naturalista y figurativa, elige explorar caminos menos convencionales. Sus lienzos muestran animales, plantas, paisajes y figuras humanas reinterpretados con una paleta vibrante y con un espíritu juguetón. No duda en situar, por ejemplo, a una rana o un saltamontes sobre ruedas, desafiando así la percepción y ofreciendo una perspectiva insólita: ¿por qué no?


Su trabajo se desplaza con naturalidad entre lo figurativo y lo abstracto. Forma parte del colectivo Driven to Abstraction, compuesto por ocho mujeres y él como único integrante masculino, lo que subraya su compromiso con la experimentación y la apertura creativa.
Temáticas y estilo: entre lo mítico y lo moderno
La obra de Bob Coonts se nutre de la mitología universal y de influencias culturales diversas: desde el arte nativo americano y celta hasta referencias asiáticas, griegas y romanas. Estas huellas se entrelazan con la herencia de grandes maestros como Gustav Klimt, Marc Chagall, Henri Matisse, Joan Miró y el contemporáneo Chuck Close.

Su estilo, definido por críticos como una forma de Surrealismo Abstracto, combina elementos geométricos —círculos, triángulos, flechas, líneas concéntricas— con una fuerza compositiva que otorga dinamismo y movimiento a cada obra. El motivo de la flecha, inspirado en los símbolos nativos americanos, adquiere un papel esencial: representa la línea del corazón, fuente de energía y vida del animal, y se convierte en un recurso recurrente en su lenguaje visual.
Una obra única, vital y conmovedora
Las pinturas de Coonts no solo seducen por su vibrante cromatismo y la elegancia de su diseño, sino también por su capacidad de evocar emociones en el espectador. Entre lo abstracto y lo figurativo, entre lo lúdico y lo espiritual, su arte invita a la contemplación y a la sorpresa.

Presentado en galerías de Colorado, Wyoming, Arizona, Idaho, Nuevo México, Washington y Oregón, su trabajo mantiene una vigencia intemporal. Bob Coonts no busca simplemente representar la realidad, sino reinventarla con imaginación, rigor compositivo y un inconfundible goce estético.
Para más información: bobcoonts.com
Seis décadas de arte contemporáneo y color con Bob Coonts. Por Mónica Cascanueces.