«Hacer estas piezas me hace feliz, y eso es lo que intento transmitir» Estas entrañables esculturas desbordan de humor y sonrisas.
Taylor Lee y sus criaturas de arcilla. Artista ceramista coreano-estadounidense Taylor Lee, conocida por sus reinterpretaciones tridimensionales de juguetes japoneses vintage, desde los Kyodai Heroes de los años sesenta, como Ultraman, capaz de crecer hasta alturas descomunales y enfrentarse a monstruos gigantes como Godzilla, hasta el protagonista del manga de culto Astro Boy, que dominó la televisión japonesa animada.
Las inspiraciones de Taylor para su trabajo actual beben en gran medida de los dramas de acción real sobre superhumanos y robots de Japón, o del género Tokusatsu, películas que hacen un uso intensivo de los efectos especiales.
En 2017, todo cambió para Taylor Lee. “Tuve una revelación”, explica. “Lo dejé todo y me dediqué por completo a la cerámica”. Y desde entonces nunca miró atrás. Sus criaturas bulbosas, divertidas y adorables han hecho posible que su pasión se convierta en su trabajo a tiempo completo.
En su estudio, un almacén luminoso y ventilado en Los Ángeles, experimenta con muchos tipos de arcilla y esmaltes. En la alfarería tradicional, el torno es la técnica estándar. Pero Lee suele construir sus esculturas a mano – no porque intente ir contra la tradición, sino porque lo disfruta.
En última instancia, el proceso consiste en divertirse. Y esas criaturas irradian esa energía: están llenas de calidez, alegría y consuelo.
El proceso creativo de Lee consiste en mezclar pasado y presente. Se inspira en el simbolismo del arte prehistórico, en la narrativa del arte popular y en el atractivo resplandor de la nostalgia pop. “Como crecí en Henderson, Nevada, donde la cultura e influencias asiáticas eran escasas, mi conexión con mi herencia floreció a través de los cómics y la cultura pop coreana y japonesa”, cuenta.
La pasión de Lee por el manga y los superhéroes la ha acompañado toda su vida: desde éxitos de los años 60 y 70 como Ultraman y Godzilla hasta clásicos de culto como Dragon Ball y Astro Boy. “No soy una artista que intente tomarse demasiado en serio los problemas o la vida o cualquier cosa”, comenta. Pero, incluso sin proponérselo, la obra de Lee es discretamente profunda – y ahí reside su magia.
Taylor nació y creció en la ciudad de Henderson, en Nevada. Estudió en la Universidad de Nevada, Las Vegas, donde descubrió su amor por la cerámica. Desde entonces, ha realizado diversas creaciones cerámicas en su práctica, que incluyen formas abstractas de figuras femeninas que evocan ídolos históricos, junto con criaturas y superhéroes de la cultura pop japonesa.
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Taylor Lee y sus criaturas de arcilla