Traza analogías entre un hombre de finales del Renacimiento y del siglo XX con una aguda sensibilidad hacia las preocupaciones contemporáneas
Jan Kott y las nuevas dramaturgias inspiradas por Shakespeare. El crítico y teórico teatral polaco del siglo XX estudió en la Universidad de Varsovia hasta que en 1938 viaja a estudiar a París. Durante la Segunda Guerra Mundial formó parte de la Resistencia. Fue profesor de literatura francesa en la Universidad de Wroclaw y de literatura polaca en la Universidad de Varsovia.
Emigra en 1966 a los Estados Unidos en donde ha sido profesor en universidades como Yale, Berkeley y Stony Brook, así como investigador de la Fundación Guggenheim de Nueva York y de la Fundación Getty de Los Ángeles.
Ha traducido al polaco a Diderot, Eluard, Sartre, Ionesco, Montherland, Camus y Maiakovski, entre otros.
Ha publicado diez volúmenes de ensayos. Se le concedió el Premio Nacional de Literatura de Polonia. Su principal obra es Szkice o Szekpirze (Apuntes sobre Shakespeare, en su primera edición española, o Shakespeare, nuestro contemporáneo en la más reciente traducción publicada por la editorial Alba) que se publica en 1961 y ha sido traducido a casi todos los idiomas europeos.
En este libro Kott traza las analogías entre un hombre de finales del Renacimiento y un hombre del siglo XX. El teatro de Shakespeare participa de este modo de la mayor parte de las influencias que mueven el teatro actual: el absurdo, la angustia, la crueldad o la didáctica.
EN SUS TEXTOS, JAN KOTT REINTERPRETA LAS GRANDES TRAGEDIAS DE SHAKESPEARE Y LAS COMPARA CON LAS MODERNAS.
Así, por ejemplo, va desvelando ecos de King Lear en Fin de partida, de Beckett, o ilustra los sueños de Titania -en Sueño de una noche de verano- en el trazo de la serie de los «Caprichos» de Goya. No en vano la edición inglesa de Szkice o Szekpirze, que estuvo al cuidado de Peter Brook, lleva el título de Shakespeare our contemporary.
La influencia de Kott ha transformado y moldeado no sólo la mirada de Brook sino la de grandes creadores como Peter Hall, Giorgio Strelherhan, Andrej Wajda y Tadeusz Kantor.
La interpretación de las obras del autor de Hamlet, formulada por Jan Kott en el libro Shakespeare, nuestro contemporáneo (o Apuntes sobre Shakespeare), surgió de las manifestaciones del totalitarismo del siglo XX, que obligaba a considerar toda forma de poder político como mal y fuente del mal. La conferencia expuso, bajo esta visión, el concepto del «Gran Mecanismo de la Historia».
Este tema le condicionó a Jan Kott, política y artísticamente, la fama e importancia mundial para las representaciones de las obras de Shakespeare en la segunda mitad del siglo XX. La aplicación práctica de este concepto se mostrará con base en los ejemplos de diversas representaciones y adaptaciones de obras dramáticas de Shakespeare; por ejemplo, la tragedia de Macbeth vista desde la escena, desde el cine con la película de Roman Polanski, y también desde nuevas dramaturgias inspiradas por Shakespeare como Macbeth de Eugène Ionesco.
Kott argumentaba que las grandes tragedias shakespearianas podían leerse como reflexiones sobre los problemas y experiencias del hombre moderno. Esta perspectiva permitía establecer paralelismos entre el teatro renacentista y las corrientes teatrales del siglo XX, como el teatro del absurdo, la angustia existencial y la crueldad.
Kott introdujo el concepto del «Gran Mecanismo» para describir la dinámica del poder político en las obras históricas de Shakespeare. Este concepto, comparable a la «Rueda de la Fortuna» medieval, ilustra cómo los monarcas ascienden al poder solo para ser derrocados en un ciclo interminable. Kott veía en esta sucesión de reyes una masa casi indiferenciada, desafiando la noción de la singularidad del poder real.
La visión de Kott no se limitaba a Shakespeare. En «El manjar de los dioses» (1970), aplicó un enfoque similar a la tragedia griega, buscando su relevancia para el público moderno.

Su método consistía en encontrar ecos de las obras clásicas en la literatura y el arte contemporáneos, como al comparar «El rey Lear» con «Fin de partida» de Beckett, o al ilustrar los sueños de Titania con los «Caprichos» de Goya. Las interpretaciones de Kott tuvieron un impacto significativo en directores de teatro como Peter Brook, Peter Hall, Giorgio Strehler, Andrzej Wajda y Tadeusz Kantor.
Su enfoque permitió nuevas puestas en escena que resaltaban la relevancia contemporánea de las obras clásicas.
A lo largo de su carrera, Kott revisó constantemente sus ideas. En sus últimos años, cuestionaba si Shakespeare seguía siendo verdaderamente contemporáneo, reconociendo que la noción de contemporaneidad cambia con el tiempo. Esta autocrítica demuestra la profundidad y flexibilidad de su pensamiento teórico.
La visión filosófica y teatral de Jan Kott se caracterizó por su capacidad para encontrar conexiones entre el pasado y el presente, revelando la universalidad de los temas abordados por los grandes dramaturgos. Su enfoque, que combinaba un profundo conocimiento de la tradición teatral con una aguda sensibilidad hacia las preocupaciones contemporáneas, sigue siendo influyente en la teoría y práctica teatral hasta nuestros días.
Jan Kott y las nuevas dramaturgias inspiradas por Shakespeare. Por Brenda Escobedo