Artista neoyorquino con un talento singular cuyos mitos y monstruos devuelven la pintura a sus raíces infantiles de un sinsentido interesante.
Robert Nava, de lo infantil a lo adulto. Nava crea su propia mitología. Sus cuadros fusionan la gestualidad abstracta con una figuración infantil que representa seres sobrenaturales como brujas, espectros, monstruos y dragones. Las obras combinan la luz y la oscuridad, explorando temas como la violencia, el sinsentido, el folclore y la fantasía. Tanto influencias antiguas como modernas alimentan el trabajo de Nava: desde tallas sumerias y pinturas rupestres, hasta el Expresionismo Abstracto, el Bad Painting y artistas contemporáneos como Huma Bhabha.


Además de la historia del arte, Nava se inspira en la vida cotidiana, ilustrando a menudo anécdotas extrañas que escucha de amigos y familiares. Con una multitud de materiales, entre ellos pintura en spray, acrílico, grafito y ceras, Nava trabaja en lienzos de gran formato, combinando capas gruesas de pintura con trazos garabateados que parecen un boceto ampliado. Todo ello compone una parodia de tropos míticos bien conocidos que generan su propia pesadilla.
Nava subraya el deseo perpetuo de la humanidad de otorgar sentido a lo desconocido. Sin embargo, desea que su obra exista sin justificación, convencido de que lo que ahora no tiene sentido encontrará otra lógica en el futuro. A esto lo llama Nava “sinsentido interesante”.
Un sinsentido que posee la espontaneidad desenfrenada de un niño, pero que surge de una intuición cultivada.

Así, el trabajo de Nava se cierra en círculo: de lo infantil a lo adulto, de la fábula a la verdad, de la lógica al absurdo. Al deshacer los grandes símbolos que representa, Nava es un artista que, sin duda, dejará huella en el arte contemporáneo con su creación mítica divertida y sin miedo.
Para más información visita su Instagram: robertnava7
Robert Nava, de lo infantil a lo adulto. Por Rose Sioux