La regla crítica. Joputería preventiva. Cuando una foca loca se parece a una mona vestida de seda, yo no sé si mona se queda o si se queda foca, pero loca, seguro. Borja soltó una carcajada que le torció la boca por culpa de su ocurrencia, aceleró el paso para ser puntual con el XXI Congreso Internacional de Joputería Preventiva y para dejar atrás ese callejón con olor a seis o siete orines disímiles y a dos o tres deposiciones de tres o dos mil leches.
Llegó justo cuando el Dr. Postilla planteaba la necesidad que existe hoy en día de modificar los aparatos digestivos de algunos pacientes.
“Determinadas acciones de los enfermos que acuden a nuestras consultas serían imposibles de entender si no fuera por un análisis exhaustivo de los órganos encargados del proceso de la digestión, porque hay que tener estómago y tragaderas para poder llevarlas a cabo”.
El prestigioso Joputólogo reconoció que su interés en esta materia había nacido hacía cinco años, cuando estaba viendo con su hijo pequeño un documental sobre los Gypaetus Barbatus, una especie de ave que pertenece a la familia Accipitridae y que es conocida como quebrantahuesos por su capacidad para alimentarse de restos óseos.
“En los casos de estadios muy avanzados deberíamos de acudir a la práctica de una joputectomía que nos permitiese la reducción de las comisuras bucales, el estrechamiento de las faringes y la constricción de los esófagos. Un proceso catabólico que permita la degradación de esos ácidos que protegen sus zonas gastrointestinales y la eliminación de las células secretoras que los producen, les permitiría ser sensibles a las putadas típicas de sus conductas”.
Dr. Postilla instó a todas las Naciones para que no escatimasen esfuerzos a la hora de monitorizar el estado de salud de nuestras poblaciones, de promover el trabajo multidisciplinar y demandar políticas que protejan la salud colectiva.
“La actividad física, la salud mental, la higiene corporal y una alimentación saludable son vitales para integrar nuestro conocimiento y acción social. Una dieta exenta de huesos imposibilitaría la formación de placas óseas en los estómagos de esos individuos que son más propensos a vivir de la carroña. La ingesta de aceitunas sin hueso y frutos secos pelados, así como la supresión de las manitas de cerdo o el rabo de toro, son fundamentales si reclamamos para nuestros hijos un futuro justo y sostenible”
“La amputación de las uñas para impedir que los joputas se agarren con sus garras a lo que no deben, sin dar ni pulir cera y con el fin de tragárselo sin dolor ni remordimiento alguno, nos permitiría concentrar los esfuerzos preventivos y terapéuticos en los seres de mayor riesgo”.
Joputería preventiva. La regla crítica por Carlos Penas