Las esculturas de Matthias Graff revelan su increíble talento para la observación y al mismo tiempo cuestionan la percepción humana de la naturaleza y su separación de ella
Matthias Garff: el vínculo entre el ser humano y su entorno. El artista suizo presenta un mundo de fantasía y creatividad donde la naturaleza y la imaginación humana se fusionan de una manera única. Con un carácter humorístico, accesible y de una belleza frágil nos invita a reflexionar sobre el vínculo entre el ser humano y su entorno.
Matthias Garff aborda el tema del animal como motivo central de su obra tanto de manera escultórica como a través de acciones performativas mostrando el vínculo entre el ser humano y su entorno.
Las figuras animales que crea a menudo adquieren rasgos humanos y se desarrollan preferentemente como individuos dentro de una comunidad. En estos grupos de figuras se despliega una red de relaciones que se asemeja a una estructura social y que enfatiza la diversidad.
Garff utiliza una amplia gama de materiales, entre los que destacan especialmente los objetos encontrados y elementos cotidianos. Las formas de sus obras emergen mediante un proceso de construcción similar al ensamblaje.
Matthias Garff, nacido en 1986 en Solothurn, Suiza, vive y trabaja en Leipzig. Entre 2008 y 2015 estudió en la Hochschule für Bildende Künste de Dresde, en la clase especializada del profesor Grossarth, y realizó estudios de posgrado con el profesor Dammbeck.
Ha exhibido su obra en Stuttgart, Dresde, Leipzig, Ulm y Buenos Aires. Sus trabajos forman parte de colecciones privadas en Dresde, de la colección del Skulpturengarten Weisser Hirsch y de la colección del Museo Bautzen. En 2016, fue nominado para el Premio de la Sezession de Darmstadt.
Matthias Garff: el vínculo entre el ser humano y su entorno