Como una partícula más, Prakash Patel se siente atraído por el infinito, le fascina el espacio ya que simplemente continúa sin fin.
Un viaje al infinito con Prakash Patel. Lo mismo ocurre cuando miras a través de un microscopio y te adentras en las cosas, afirma. En realidad, no hay un punto donde termine, ¿sabes? La partícula más pequeña es realmente misteriosa porque es casi como si volviera a entrar en el infinito otra vez. Algo que va hacia afuera y hacia adentro. Es lo mismo.
Una gran obra con tonos fluorescentes de rosas y azules, y brillantes puntos de oro sobre fondo negro. Prakash utiliza pintura iridiscente para jugar un poco con la luz. También purpurina, pero no la coloca deliberadamente, simplemente la añade a las cosas para que, cuando se apagan las luces y está oscuro, haya pequeños destellos de luz que salen de la pintura y produzcan la sensación como si estuvieras mirando al espacio.
A primera vista, las pinturas de Patel parecen profundamente y conscientemente arraigadas en su herencia india, con sus patrones y motivos repetitivos, y sus colores brillantes e iridiscentes. Sin embargo, al observarlas más de cerca, ofrecen algo más universal, incluso cósmico.
Los lienzos se transforman en un cielo nocturno lleno de estrellas, cometas y cráteres en planetas distantes, o en el hogar de luciérnagas o explosiones de fuegos artificiales. Del mismo modo, nos podrían sumergir en las profundidades de un océano desconocido, habitado por criaturas extrañas y luminosas que se balancean en cálidas corrientes invisibles. Son misteriosas, hermosas y decididamente indefinibles.
El artista comenta: «Encuentro que los aspectos fundamentales de la filosofía india resuenan fuertemente en mi obra, particularmente en la forma en que se adhiere a una visión holística, donde todo está conectado, desde el mundo microscópico hasta el cosmos.»
Patel nació en Whanganui en 1968, donde actualmente vive y trabaja. Expone regularmente en la región y está representado en las colecciones permanentes de la Galería Sarjeant y en colecciones privadas en toda Nueva Zelanda.
Un viaje al infinito con Prakash Patel. Texto: RX