Sus obras se caracterizan por la representación de retratos a niños discapacitados, personas transgéneros, prostitutas o miembros de su propia familia.
El lado oscuro de Philippe Pasqua. Sus composiciones son potentes y viscerales, con vistas desde ángulos extraños, a menudo poco favorecedores. El artista reflexiona sobre la convivencia entre la belleza y la fealdad.
Philippe Pasqua se ha consolidado como uno de los grandes artistas del panorama artístico internacional. Su visión del mundo y las personas queda plasmada en sus obras, siempre de grandes dimensiones, que impactan e invitan a reflexionar sobre la naturaleza humana.
Pasqua pasa del dibujo a la pintura, donde destaca por su personal estilo figurativo próximo a los expresionistas, y del collage a la escultura a través de su particularidad.
En sus pinturas, en ocasiones, deja al descubierto el lienzo sobre el que hace uso de una paleta cromática compuesta por colores crema, rojos y azules, en ellas, se observan trazos, pinceladas, marcas, chorreones o acumulaciones de óleo.
El lado oscuro de Philippe Pasqua. La influencia de artistas como Francis Bacon, Lucian Freud o Tim Burton se vislumbra en sus obras a través de personajes con intensas gestos faciales o actos íntimos del cuerpo.
Su proceso de creación comienza con la toma de imágenes a sus modelos, buscando captar una mirada o una pose. A partir de esas fotos, los pinta intentando reflejar aquella parte de ellos que los hacen especiales o que no se ve a simple vista.
La fragilidad de la locura y la discapacidad son temas que trata en su obra de forma recurrente.
En sus obras más tempranas aparecen a modo de collage diversas formas de esculturas clásicas, muñecos de vudú, un anciano o máscaras.
En la actualidad, pinta retratos, caras y cuerpos desnudos, sin desviarse de la realidad, sin apenas objetos adicionales como en sus obras Arnaud (2007) y Anne (2006) que son ejemplo de ello. Sus pinturas van más allá de la representación física o superficial ya que busca la emoción en el individuo.
Utiliza como modelos a personas marginadas (transgénero o prostitutas), personas con discapacidad (síndrome de Down o ciegas) o personas de su círculo más cercano (amigos y familiares como su hijo Orso) convirtiéndolos en iconos, reflejo de lo universal.
Como escultor, ha profundizado también en otros temas como el agotamiento de la tierra y la desaparición de las especies, o el concepto de lo sacro próximo a lo religioso con la obra La Cène (2017), en la que monos con cabeza de payaso sentados a una mesa evocan La última cena de Leonardo da Vinci que parte de las ideas de Darwin y de los científicos contemporáneos. El artista invita al espectador a reflexionar sobre la convivencia cuestionando los valores morales de nuestro tiempo.
La muestra El lado oscuro es la primera exposición individual en España de Philippe Pasqua, comisariada por Fernando Francés, que repasa tres décadas de trabajo del artista. Reúne más de una treintena de obras, pinturas de gran formato y dos trabajos escultóricos, realizadas desde 1990 hasta la actualidad.
Sus obras se caracterizan por la representación de retratos, caras y desnudos tomando como modelos a niños discapacitados, personas transgéneros, prostitutas o miembros de su propia familia. El artista reflexiona sobre la convivencia entre la belleza y la fealdad, cuestionando los valores morales de nuestro tiempo. Philippe Pasqua se ha consolidado como uno de los grandes artistas del panorama artístico internacional.
El lado oscuro de Philippe Pasqua. Por Lady Cascanueces.