Los retratos de Mike Dargas captan las emociones de personas perdidos en sus pensamientos que muestran conflictos internos o transmiten una calma única e incluso sagrada.
El trabajo del pintor alemán Mike Dargas está marcado por el hiperrealismo. Sus obras están protagonizadas por gente común, que Mike encuentra en cualquier lugar. Así logra retratar gente sin importar si son jóvenes o viejos, ya que la idea es transmitir, los conflictos interiores y las imperfecciones que finalmente hacen a cada ser único.
En su último trabajo Mike pinta a mujeres cubiertas en miel utilizando oleos sobre tela. Con sus técnica él busca la imagen perfecta, desafiándonos a tomar una mirada más profunda para entender la naturaleza del ser humano.
Inspirado por artistas como Dalí, Caravaggio y HR Giger, Mike Dargas estudió diversas técnicas y desde joven desarrolló una pasión por el realismo, que refinó con el tiempo hasta llegar al hiperrealismo. A principios de sus veinte años, se ganó una sólida reputación en la escena de tatuajes y ganó numerosos premios.
La técnica extremadamente precisa con pintura al óleo ofrece, como una fotografía, un instante del momento de una emoción humana concreta que emana placer, alegría y personalidad.
Perdidos en sus pensamientos, los rostros muestran conflictos internos o transmiten una calma única e incluso sagrada. El artista estudia a sus sujetos con tanta intensidad que cada retrato muestra un perfil de cercanía íntima en aumento.
Cubre las caras de sus modelos o vela la piel con sustancias enigmáticas que se parezcan a la miel, el aceite o el chocolate. Además algunas de sus nuevas piezas incluyen papeles traslucidos, velos, mostrando diferentes perfiles de su técnica hiperrealista.
La perfección de su técnica sirve a su objetivo de tender hacia la imagen perfecta, buscando el alma en cada uno de ellos. A través de sus obras, Mike Dargas nos desafía a observar más de cerca, a comprender la naturaleza del ser humano y a cuestionar nuestra propia percepción emocional.
Pero su predilección no se quedaba solo en la pintura. Se formó como carpintero y desarrolló interés por el arte tridimensional, gracias a la formación en la escuela de pintura y la creación de esculturas en metal y madera. A pesar de su formación su pasión continúo siendo la pintura.
Mike Dargas y las emociones humanas. Publicado por Trilulï Kappi