La idea es apurar la puesta de sol y cenar algo en la terraza de Store Formentor
The Store: apurando la puesta del sol en Port de Pollença. En ocasiones el paraíso está mucho más cerca de lo que creemos. En este caso está a escasos minutos del puerto de Pollensa, por el camino hacia las idílicas playas de Formentor. Por lo menos, a mí me parece que esta terraza junto a una tienda-supermercado, es un pequeño paraíso al alcance de cualquiera.
The Store: apurando la puesta del sol en Port de Pollença. “Aquí todo el mundo es bienvenido”, explica Toni Torrens, el propietario. Y sigue: “En verano, es muy popular venir a tomar un gin tonic. Y muchos ciclistas vienen al terminar su circuito”.
Puedes ver gente tomando cerveza fría, leyendo, en bañador y sin ninguna prisa, su novela veraniega. Es un lugar relajado, todo toma su tiempo y espacio.
La carta es corta, fácil, sin sofisticaciones. Tiene una sección de tapas en la que no faltan las bravas, la fritura de mariscos, los mejillones a la marinera, el pulpo a la plancha.Y luego está la sección brasa con sus carnes barbacoa.
En verano, por la noche, dinamizar el espacio con actuaciones musicales es llevar la experiencia a otro nivel. A medida que el sol se pone y el cielo pasa del rojo al naranja y luego al amarillo y al violeta, las mesas van pidiendo mojitos y gin tonics.
Las risas suben de nivel, oscurece y apetece algo de cenar. Quizás una hamburguesa o picar algo variado y disfrutando del momento sin prisas y al aire libre.
Por Bernd Eldelbar
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