Lena Krassner nació en Brooklyn y creció en el seno de una familia de emigrantes rusos, judíos ortodoxos.
Color vivo en el Guggenheim Bilbao con Lee Krasner. Con 14 años de edad decidió dedicarse al arte y fue de las primeras creadoras de Nueva York que adoptó un planteamiento totalmente abstracto, convirtiéndose en pionera del Expresionismo Abstracto.
En 1942 sus obras se incluyeron en la exposición colectiva French and American Painting y, dado que el único de los artistas incluido en aquella muestra a quien no conocía era Jackson Pollock, Krasner decidió ir a visitar su estudio. A partir de entonces, iniciaron una relación; en 1945 contrajeron matrimonio y se trasladaron a Springs, en Long Island.
Color vivo en el Guggenheim Bilbao con Lee Krasner. A diferencia de muchos de sus contemporáneos, Krasner se negó a crear una “firma inconfundible”, algo que le parecía “rígido y nada vivo”.
Al trabajar en ciclos de obras, buscó continuamente nuevos medios para alcanzar una expresión auténtica, incluso en sus épocas más turbulentas, debidas a la inestabilidad emocional de Pollock y a la muerte repentina de este en un accidente de automóvil en 1956.
El formidable espíritu de Krasner se percibe a través del conjunto de obras que creó en su estudio a lo largo de más de cincuenta años, y que celebramos en la presente exposición.
Exposición organizada por Barbican Centre, Londres, en colaboración con el Museo Guggenheim Bilbao. Con el apoyo de la Terra Foundation for American Art
- Comisarias: Eleanor Nairne y Lucía Agirre
- Hasta el 10 de enero 2021
Color vivo en el Guggenheim Bilbao con Lee Krasner. Por Museo Guggenheim Bilbao