Entrevistamos a Pato Conde, profesor de artes visuales
¿Quién es Pato Conde? No lo sé muy bien, me gusta la etiqueta de «autor», más que nada porque me gusta contar historias en diferentes formatos.
Has publicado el cómic “Nadie al volante”, cuéntanos un poco, ¿cómo surgió la idea? ¡»Nadie al volante» es el segundo disco del grupo Téntol! en el que tocaba la bateria junto a David Delgado y Toni Brasil. El cómic intenta ser una especie de videoclip pero en papel que ilustra las canciones instrumentales del grupo. La edición estuvo a cargo de Pau Castanyer dentro de su editorial «Edicions del Despropòsit».
Háblanos del color, te pregunto por ello porque en tus ilustraciones predomina el color negro o blanco-negro… Me encanta el dibujo en blanco y negro. Creo que es muy útil para sintetizar ideas. Desde hace un par de años estoy trabajando en esta serie de viñetas diarias («Historias del espacio exterior») en las que intento transmitir ideas simples y la ausencia de color ayuda a que sea rápido de leer. Me gusta la línea blanca sobre fondo negro porque no es lo habitual.
¿Qué te inspira y que temas tratas en tus ilustraciones? En este ejercicio de publicación de viñetas a diario busco la inspiración en todos lados. Estoy atento a todo lo que me rodea y utilizo cualquier cosa para llevarla al dibujo/texto. Siempre me interesaron los artistas que trabajan con lo que tienen cerca, siempre salen cosas viscerales y, sobre todo, sinceras.
¿Crees que el arte (la ilustración) como lenguaje tiene censura o limite? Si que se dan casos de censura que llegan a ser mediáticos. Creo que la peor censura que existe es la del propio autor. A mí me pasa todo el tiempo y trabajo para deshacerme de ella. También tengo que decir que gracias a internet podemos acceder a contenidos dificilmente censurables. Siempre fantaseé con la idea de convertirme en un artista totalmente anónimo para no tener límites.
Tal como el mundo avanza en todos los aspectos ¿Cómo consigues atrapar la atención de tus alumnos? Yo trabajo en el CEF, la escuela de artes visuales, y tengo la suerte de que me dan bastante libertad con la metodología de enseñanza. Creo que para tener la atención de mis alumnos hago un esfuerzo enorme para intentar entenderlos, adaptarme a lo que necesitan. Aunque sea el primer curso que hacen siempre vienen con mucha sabiduría e intento limitarme a darles el empujón para que aumenten el nivel técnico y den rienda suelta a la creatividad.
¿Qué inquietudes tienen los alumnos hoy en día? Cada alumno es un mundo. Siempre intento exprimirlos para saber lo que les interesa y nunca dejan de sorprenderme. Siempre lo pregunto y la mayoría coinciden en que tienen un interés muy grande en el campo artístico. El tema series, música y videojuegos es lo que creo que más les interesa en edades tempranas, a medida que van pasando de curso se decantan más por artistas relacionados con lo que están estudiando.
¿Cómo ves el futuro? ¿Prefieres la fantasía o la realidad? Intento no pensar mucho en el futuro. Desde que soy padre intento hacer cosas positivas para mi entorno y que mi hija entienda que hicimos lo posible por dejarle un lugar donde pueda estar bien. Si que reflexiono mucho sobre lo que estamos haciendo a la isla y en mis ilustraciones intento subrayar muchos problemas, sobre todo sociales y ecológicos, que creo que tendrían una fácil solución si no fuésemos tan ambiciosos.
¿Qué significa tener miedo para ti? ¿Es necesario el miedo para aprender? Creo que sentir miedo es natural. No creo que sea necesario para aprender, la mejor manera es hacerlo a través de la observación y la tranquilidad. Es verdad que podemos aprender de las malas experiencias pero eso es otro tema.