Sabías que todos los sábados de diciembre en Cuina Vivant ofrecerán un alegre aperitivo, despertando la conciencia con pequeñas réplicas de los platos de su carta.
Llega el «picoteo que no tiene desperdicio» de Cuina Vivant. Sumergidos en una conciencia más ética con el planeta los anfitriones abanderan el empleo racional de los alimentos. Pilar Palou Gari y Tomás Ketlun Gallego son extremadamente meticulosos con el desperdicio y un claro ejemplo de que con conocimiento y pasión, es posible ofrecer platos de altura reaprovechando los recursos.
Tienen claro que este enfoque aumenta la calidad de los platos, el prestigio del local, protege el medio ambiente y estimula poderosamente la imaginación. Por supuesto, la elección de la materia prima también marca el camino y aquí aprecian los pescados no tan vistos o no tan comerciales.
Tomás Ketlun aprovecha cada pieza de los pescados enormes que provee de Pescadería Soler Sastre del Mercat Pere Garau, y que gracias a su talento, ha sabido convertir algo como una cabeza enorme de Llampuga en un codiciadísimo plato.
El reaprovechamiento y la lógica a favor de la sostenibilidad, nos vamos de “picoteo que no tiene desperdicio” con Cuina Vivant
Sabías qué Pétillant naturel en francés designa los vinos naturales ligeramente espumosos. El término Pét-Pat alude por tanto al estilo y a la forma en la que se han elaborado esos vinos.
«Los Finger food, el vermut y los vinos pét-nat que se han convertido en la última corriente que ha llegado al mundo del vino siguiendo la estela de los vinos naturales elaborados por el Método Ancestral, además acompañaremos estas mini fiestas con algo de música«, comparte con nosotros apasionadamente Pilar
Pequeños gestos como estos pueden mejorar el mundo en una época tan señalada y de puro derroche, porque sí existe una Navidad festiva que no tiene desperdicio.
¿Cuándo? Todos los sábados 2, 9, 16, 23 y 30 de diciembre de 12:00 a 15:00 horas
Llega el «picoteo que no tiene desperdicio» de Cuina Vivant. Por Rose Sioux.