John Cuneo la rompe en Instagram con más de 50,000 seguidores. Su lema es simple: «Dibujos principalmente. Pensamientos oscuros un poco representados».
Dando un paseo por las ilustraciones de John Cuneo. ¿Cómo se las arregló para conseguir tantos seguidores? Es un misterio para este ilustrador que ha estado en todas las revistas importantes en las últimas tres décadas, ¡incluso en la portada del New Yorker! Él mismo está desconcertado, diciendo:
«Ni idea de cómo llegué a esos 54,000 seguidores. Supongo que gente como Neil Gaiman o Ron Perlman le dieron un empujón a mi cuenta en algún momento».
Instagram resulta ser como el lugar perfecto para este ilustrador suelto. Cuneo es adicto al dibujo. «Soy el tipo que siempre lleva consigo un cuaderno o una tarjeta para dibujar algo en cualquier momento.
Dando un paseo por las ilustraciones de John Cuneo. ¡Dibujo constantemente!», comenta, señalando su Instagram como el espacio ideal para mostrar todo su trabajo.
Publica casi a diario, sacando a relucir fantasías masculinas, escenas de vida cotidiana y política con sketches que muestran más partes íntimas que un vestuario.
«Me la juego con una cantidad alarmante de genitales por alguna razón», confiesa Cuneo. Pero todo ese toque erótico tiene su trampa. «Me he metido en un rincón. Si hago un dibujo normal, la gente pregunta: ‘¿Dónde está el miembro?'».
Algunas de sus representaciones más picantes son del expresidente de EE. UU. número 45, a quien Cuneo disfruta enviándole ilustraciones subidas de tono. Vale la pena revisar un par en su Instagram: Bill Barr limpiando el trasero de Trump con la Constitución y Trump utilizando documentos secretos de manera parecida.
Claro, también hay un montón de «dibujos normales». Cuneo ilustra una columna sobre perros cada mes para Garden & Gun, como el boceto de la portada de este mes. Toca un nervio para los creativos preocupados por ser reemplazados por la inteligencia artificial. Cuneo no es muy optimista sobre el futuro de su profesión.
«Al principio pensé que era solo un cambio en la industria del arte digital, pero ahora veo que es una amenaza existencial. Es el fin de la ilustración. Así que me pongo anteojeras y me concentro en mi cuaderno de bocetos».
Cuneo es un ilustrador clásico: nada de herramientas digitales, solo pluma, tinta y acuarela. Para él, la artesanía es esencial. «La línea es crucial para aquellos que trabajan en tinta, es la esencia», dice. «El truco es controlarla mientras se deja llevar. Hay un extraño equilibrio entre el control y el caos».
Cada nuevo dibujo es una construcción del mundo. «Algunos tienen un plan, como el que estás viendo en la portada, pero muchos otros simplemente evolucionan a partir de una figura en la página. Elementos se añaden de manera extraña, mitad planeado, mitad asociación libre, creando tal vez un escenario o concepto real», explica Cuneo. «A veces es un desastre autoindulgente, pero como dice Linda Barry: ‘A veces tienes que hacer cosas sin razón'».
Hacer cosas sin razón es lo que nos hace humanos. La inteligencia artificial puede reemplazarnos en algunas cosas, pero no nos quitará esa tendencia a hacer cosas sin razón. A menos que nos elimine a todos, claro.
Dando un paseo por las ilustraciones de John Cuneo. Por John Headhunter