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Zahra Akbari Baseri y la magia del retrato a lápiz

Los dibujos a lápiz tienen un encanto especial que solo los profesionales que se dedican al retrato son capaces de captar o transmitir.

Zahra Akbari Baseri y la magia del retrato a lápiz. Los suyos emanan una delicada magia que la fotografía no es capaz de recoger. Tiene que ver con captar la esencia de un rostro, un cuerpo con la personalidad de cada gesto, de cada expresión, de cada arruga.

Una imagen despojada de adornos, eliminando lo que distrae, porque el retrato a lápiz se centra en la emoción y en la conexión con su entorno que la persona retratada refleja en su mirada, su personalidad. En la era de la imagen digital los dibujos profesionales a lápiz son capaces de encontrar sentimientos en lugar de píxeles.


Pero los dibujos de Zahra Akbari Baseri hechos a lápiz no solo son el fruto de una mirada especial sobre el retratado, sino que requieren de una experiencia forjada durante años de práctica. Son el resultado de la combinación entre la técnica y la pasión, una mezcla que se expresa con la imagen mejor que con la palabra. El retrato en los dibujos hechos a lápiz es la síntesis casi mágica de esa convergencia.

La magia del retrato a lápiz de Zahra Akbari. Dibujos con un fuerte énfasis en el retrato, basados a la tradición y la contemporaneidad

Los retratos de Zahra Akbari Baseri no solo viven de la emoción que transmiten, también se hacen duraderos sobre el papel y se pueden enmarcar para hacerlos más terrenales. Pero incluso así, al verlos nos recuerdan aquellos tiempos en los que las imágenes había que hacerlas eternas con pinceles, lápices o carboncillos.

Los expertos y los niños, que son capaces de descubrir relaciones ocultas, saben que en esos trazos subjetivos hay más verdad que en la realidad misma. Para elegir los dibujos hechos a lápiz no hace falta descartar otras técnicas, ni es necesario ser un noble o un personaje famoso, solo es necesario apreciar ese delicado encanto de la emoción, tan antigua como el ser humano.

Un poco más sobre Zahra Akbari Baseri.

Nacida en Irán y radicada en Londres, Zahra Akbari Baseri es una artista autodidacta que combina conceptos contemporáneos con técnicas tradicionales. Su dibujo principalmente a lápiz o acrílico sobre lienzo con un fuerte énfasis en el retrato se basa a sus tradiciones culturales y puntos de vista del mundo que la rodea.

Cuando era niña, cuenta Zahra Akbari Baseri, quería ser cirujana cardíaco. Siempre decía a su madre: “Algún día voy a operarte el corazón”, se ríe. Quería ser médico, ese era su sueño. Era buena en física y matemáticas, así que había pensado que tiene la capacidad para hacerlo, pero las cosas cambiaron.


Descubrió la pintura por casualidad. Fue muy raro para ella. Cuando tenía 10 o 12 años, pintó algo para la escuela y la maestra quedó impresionada. Hablaron con sus padres acerca de que se convirtiera en artista. Empezaron a enviarle a diferentes clases, así que no fue una opción para ella.

Zahra Akbari Baseri (n. 1988 Irán) estudió BA Diseño de Alfombras en la Universidad de Arte y Arquitectura Ardakan, Yazd (2012). Las exposiciones colectivas seleccionadas incluyen: The Society of Graphic Fine Art, Londres (2021); Arte figurativo ahora, Londres (2021); La Royal Society of Portrait Painters, Londres (2020). Los premios recientes incluyen: Premio Patsy Whiting, The Society of Women Artists (2020). Vive y trabaja en Londres.


Zahra Akbari Baseri y la magia del retrato a lápiz. Por Rose Sioux

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