¿Y si fuéramos paisajes? propone una manera de mirar, partiendo de retratos que hablan de lo Trans como un “más allá de”, rompiendo con el discurso binario predominante.
En el presente proyecto planteo qué pasaría si mirásemos nuestros cuerpos como miramos los paisajes (en especial me refiero al encuentro directo con la naturaleza): recibirnos con cierta “mirada vacía” por decirlo de algún modo, sin prejuicios, mirada que recibe y cobija, que nos acepta tal y como somos, cuerpos en libertad.
Nikita es una persona que se define como transgénero. Aún recuerdo aquel primer encuentro, cuando enfatizó sobre el hecho de que, a propósito del idioma español y sus categorías binarias de pronombres él/ella, la mayoría de nosotros aún nos relacionamos a partir de lo que tenemos entre las piernas, como si habláramos de genital a genital, cuando en realidad hablamos mirándonos a los ojos, de persona a persona.
Una de las bases de mi trabajo artístico es visibilizar aquello que insiste para existir, afirma Luz Soria
Hago referencia tanto a cuestiones de género que atraviesan en especial a Nikita, como a cuestiones de territorio que me afectan a mí como inmigrante, por mencionar solo dos líneas de un trabajo más amplio que aún está en proceso.
