El mundo amarillo es un libro de la vida de Albert Espinosa cuando él tenía 13 años: fue diagnosticado con cáncer; A los 14 años, su pierna izquierda fue amputada, su pulmón izquierdo fue retirado a los 16 años, y parte de su hígado fue removido a los 18 años.
Hace un par de meses se me pinchó la rueda. ¿A qué viene esta tontería? Pues a que gracias a eso entré en el particular mundo de Albert Espinosa. Tuve que esperar unas horillas en un centro comercial y como siempre me fui para los libros, vi Si tu me dices ven lo dejo todo… pero dime ven, y casi que me leí medio libro directamente. Pero no es ese el título del que os voy a hablar, sino otro, El mundo amarillo, que me lo regalaron acertadamente junto con el ya mencionado.
El caso es que todavía no había llegado el boom que hay ahora mismo con Albert y su libro, claros triunfadores de todas las ferias celebradas, y coincidió que además del incidente de la rueda, un par de días más tarde me senté a ver el programa de Buenafuente (que hacía mucho que no lo veía) y allí estaba él, hablando de su libro. Y aunque ya me sonaba, no le ubicaba mucho, y la entrevista que hizo me terminó de decidir para entrar en sus obras. En fin, que me voy por las ramas, entremos en ‘El mundo amarillo’ de Albert.
‘El mundo amarillo’ está considerado como un libro de autoayuda por mucha gente, aunque el propio autor defiende que no se trata de ese tipo de libros porque no pretende dar soluciones, sino simplemente hace referencia a unas enseñanzas que pone en práctica en su vida, y que aprendió durante el tiempo que tuvo cáncer. Y es que Albert tuvo esta enfermedad tan conocida por todos durante diez años (en su adolescencia y juventud). Nada menos que cuatro diferentes que le han dejado como resultado sin una pierna, un pulmón y un trocito de hígado. Hoy está totalmente curado, y nos muestra lo mucho que aprendió en esa vida de hospital.
He de reconocer que este tipo de libros no suelen colarse entre mis lecturas, y no me gusta la autoayuda, pero coincido con el autor en que no se trata de uno de ellos. Para mí, lo que hace es ofrecernos una manera admirable de enfrentarse a la vida, con una vitalidad por encima de cualquier límite. Así que eso es lo que nos ofrece en ‘El mundo amarillo’, una ventanita por la que podemos ver su mundo, encantado de compartirlo con todos nosotros.
Evidentemente, tiene mucho de autobiográfico este libro, que logra sacarnos más de una sonrisa al igual que logra estremecernos por momentos. Lo leí de un tirón en un viaje de tren, y más de una vez me detuve a reflexionar sobre lo que acababa de leer. Está escrito de una manera muy amena y clara, con una cercanía impresionante, que hace que parezca que estemos tomándonos un café con Albert.
A grandes rasgos, su estructura se divide en una serie de descubrimientos, que son todo lo que aprendió en la citada época de hospitales, para después contarnos a qué se refiere con el mundo amarillo y quienes son los amarillos. El concepto de amarillo es lo más importante del libro, e inconscientemente, recién terminado el libro te pones a buscar tus amarillos del pasado y te preparas para estar alerta en el presente. Resumiendo mucho, los amarillos son personas especiales en tu vida, pero no hablamos de amores ni de amigos, ese es otro tema.
Hay que decir que Albert Espinosa no puede ser más hiperactivo. A los libros citados hay que sumarle Todo lo que podríamos haber sido tú y yo si no fueramos tú y yo, pero eso no es ni mucho menos todo. Nacido en 1974 e ingeniero industrial también está muy involucrado en el mundo del cine y la interpretación. Es el autor del guión de la exitosa película Planta 4ª o de Tu vida en 65’, y debutó como director con No me pidas que te bese, porque te besaré. Además también ha hecho sus pinitos delante de la camara, con su exitoso papel en la serie Abuela de verano. Vamos, que no para este hombre.
Poquito más os puedo decir, sólo que si aún no lo habéis hecho, le deis una oportunidad a este hombre que nos trae una visión optimista que no viene nada mal en estos duros tiempos que corren. Por mi parte, lo pasé bien leyendo ‘El mundo amarillo’, y está claro que algo del libro se te queda durante mucho tiempo. Pues eso, que si estáis un poco bajos de moral o simplemente queréis conocer mejor la historia del simpático Albert, no dudéis en entrar en estas páginas. Seguro que no os arrepentís.
Yo siempre he creído que el mundo amarillo es el mundo en el que realmente estamos. El mundo que nos muestran las películas, el del cine, es un mundo creado por tópicos que no son verdad, y acabamos pensando que el mundo es así. Te enseñan cómo es el amor, y luego te enamoras y no es como en las películas. Te enseñan cómo es el sexo, luego tienes sexo y tampoco se parece al de las películas. Hasta te enseñan cómo son las rupturas de las parejas. Cuántas veces la gente ha quedado con su pareja en un bar y ha emulado una ruptura de cine. Y no funciona, no funciona porque lo que en el celuloide se despacha en cinco minutos, luego a ti te lleva seis horas y al final no rompes sino que te comprometes a casarte o a tener un hijo.
Vía Papel en blanco