INFOMAG MAGAZINE

«Desayuno de Avispón: Historias susurradas» de Pasha Shappo

La nueva exposición de este famoso artista multidisciplinar ruso en Gallery Can Boni de Palma

«Desayuno de Avispón: Historias susurradas» de Pasha Shappo. Este polifacético artista ha cultivado una trayectoria que abarca la escenografía, la dirección cinematográfica y la literatura; sin embargo, su vocación más profunda permanece anclada en la pintura de caballete, el collage y el arte gráfico.

Su itinerario creativo se inicia en la ciudad de Vitebsk, cuna de vanguardias y también enclave donde trabajaba su padre, el renombrado artista gráfico Vladimir Shappo.

Allí Pasha se formó en la Facultad de Artes Gráficas, y desde entonces ha trazado un periplo vital y profesional por Minsk, San Petersburgo, Bakú, Moscú, Varsovia y Ciudad de México.

Miembro activo de las uniones bielorrusas de artistas, cineastas y diseñadores, Shappo presenta en España la exposición Desayuno de Avispón. Historias susurradas, una selección de piezas que funcionan como viñetas íntimas de una narración visual. Cada obra es un suspiro suspendido, una historia a medio decir, donde la energía vital se entrelaza con pasajes eróticos y emociones sugerentes.

«Desayuno de Avispón: Historias susurradas» de Pasha Shappo. En sus lienzos conviven el minimalismo y el gesto expresivo, los vacíos y las explosiones de color, en una danza pictórica que evoca tanto la memoria como el deseo.

«Estas son pequeñas historias que me ocurrieron o que me contaron, siempre con una copa de vino en la mano, en alguna terraza de verano», confiesa el artista. «Historias que me susurró el océano…”.

En su estudio, los ecos de voces femeninas, el susurro de un sofá antiguo, y los fragmentos de melodías urbanas captadas al azar —como un tema funk que se escapa de un coche en un cruce—, se transforman en imágenes. Lo no escrito se convierte en trazo, lo olvidado resucita en el color.

Hoy, sus obras forman parte de importantes colecciones públicas y privadas en Europa, América y Oriente Medio, incluyendo el Museo de Arte Ruso Contemporáneo de Nueva Jersey y el Museo de Arte de Vitebsk.



Por Rose Sioux.

Salir de la versión móvil